ORACIONES

   

A Cristo crucificado

 No me mueve mi Dios para quererte,

el Cielo que me tienes prometido,

ni me mueve el infierno tan temido

para dejar por eso de ofenderte.

 

Tú me mueves Señor, muéveme el verte

clavado en una Cruz y escarnecido.

Muéveme ver tu cuerpo tan herido,

muévenme tus afrentas y tu muerte.

 

Muéveme, en fin, tu amor de tal manera

que aunque no hubiera Cielo yo te amara

y aunque no hubiera infierno te temiera.

 

No me tienes que dar porque te quiera,

pues aunque lo que espero no esperara,

lo mismo que te quiero te quisiera.

 

Examen de conciencia

Gracias , Señor, por el día,

que hoy acabo de vivir.

Perdona, Padre, si en algo

me he alejado de Ti.

¿He rezado? ¿He obedecido en casa?

¿He ayudado a los demás?

¿He aprovechado las clases y hecho los deberes?

¿Qué he hecho bien? ¿Qué he hecho mal?

¿Qué podía haber hecho mejor?

 

Yo pecador 

Yo confieso ante Dios todopoderoso y ante vosotros hermanos, que he pecado mucho de pensamiento, palabra, obra y omisión. Por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa. Por eso ruego a Santa María, siempre Virgen, a los Ángeles, a los Santos y a vosotros, hermanos, que intercedáis por mí ante Dios, nuestro Señor.