EL CONVENTO DE GETXO
Ya eran estos años de cierta turbulencia social, y cuando estalló la guerra civil, las religiosas fueron obligadas a abandonar el convento por parte de las milicias. El 23 de septiembre de 1939, una vez finalizada la guerra, pudieron volver a ocupar el convento aunque era necesaria una buena reparación por haber estado destinado durante esos años a hospital. A partir de 1964 el barrio de Santutxu comenzó a desarrollarse urbanísticamente. Las nuevas construcciones dominaban enteramente el convento y la huerta por uno de sus lados. Además, en los nuevos planes de urbanización estaba previsto que dos calles cortarian la huerta dejándola reducida. Era necesario volver a trasladar el convento. Se llegó a un buen acuerdo con una empresa inmobiliaria. Está quedaba en posesión de la finca de Santutxu, con miras a edificar viviendas en la que el solar. Se comprometía por su parte a edificar otro convento nuevo, según los planos que presentan las Carmelitas en el lugar por ellas elegido. Con la ayuda de don Enrique Landecho, se consiguió adquirieron 3 hectáreas de terreno, propiedad de los señores Urrechua, a poca distancia de la parroquia de Santa María de Getxo. El 13 de agosto de 1966 las religiosas del convento de Santutxu se trasladaron al nuevo convento de Getxo. |
||